«Mi médico me ha prescrito una Colposcopia ¿por qué?»

Dra. Mariella Lilue 

Centro Médico Instituto Palacios


La colposcopia es una técnica de evaluación de la vulva, vagina y cuello del útero, de forma ampliada, para el diagnóstico precoz o temprano de lesiones del mismo que no son visibles a simple vista. Es un procedimiento ambulatorio, es decir, no requiere hospitalización.

Para ello, se utiliza el colposcopio, que es un aparato con varios aumentos y mecanismo de enfoque fino que nos permite esa visión ampliada y el diagnóstico de lesiones con mayor exactitud. Tiene, además, la ventaja de localizar mejor las lesiones así como de escoger el tratamiento preciso para cada una de ellas.

Definición por la Sociedad Española de Ginecología y Obstetricia: “técnica de observación de la superficie externa del cuello del útero, vagina y vulva, que permite identificar determinadas alteraciones no visibles a la inspección ocular directa y biopsiarlas (biopsia dirigida), evidenciando así el cáncer cervical en sus estadios más precoces o aquellas lesiones preclínicas no invasoras“.

Se trata de una técnica que conlleva tiempo en su realización, para así poder evaluarlo de forma exhaustiva, por lo que este examen debe realizarse con personal entrenado. Además, no debe hacerse durante el periodo menstrual ya que dificulta la visualización del cérvix.

¿Cómo se realiza?

  1. Una vez que la paciente está en posición ginecológica, se coloca el espéculo para visualizar el cuello uterino, la vagina y la vulva, sus características, si existe alguna lesión a simple vista y se limpia si hay alguna secreción.
  2. Posteriormente, se coloca un filtro de color verde para identificar la existencia de vasos atípicos (anormales) en el cuello del útero.
  3. Luego, se coloca ácido acético, un líquido que nos permite evaluar las zonas blancas, que podrían corresponder a una lesión y, de esta manera, si fuera necesario, se podrían tomar biopsias (muestras) de forma dirigida y, así, identificar con la mayor precisión alguna lesión.
  4. Por último, colocamos solución de yodo-lugol (test de Shiller), que también nos ayuda a la identificación de lesiones. Si vemos alguna lesión, se toma biopsia dirigida a esa zona que, posteriormente, se coagulará para evitar el sangrado. Dicha muestra se envía al patólogo para su evaluación.

La colposcopia es el segundo paso en el cribado del cáncer del cuello útero. Está indicado realizarla en los siguientes casos, según la Asociación Española de Patología Cervical y Colposcopia (AEPCC):

ID-100249159

  •      citologías alteradas (ASCUS-H, LSIL, HSIL, ALTERACIONES GLANDULARES)
  •      VPH POSITIVO (sobre todo en mayores de 35 años)
  •      Cuello uterino clínicamente sospechoso
  •      sangrado post coital
  •      seguimiento cuando se han detectado lesiones
  •      y seguimiento de lesiones durante el embarazo, entre otras.

La colposcopia es un procedimiento muy seguro, sin embargo, en ocasiones pueden existir complicaciones a la hora de tomar una biopsia (muestra del cuello) como son dolor, sangrado y, en raras ocasiones, infecciones.

 

¿Inconvenientes?

Los inconvenientes de la colposcopia: se  debe realizar con un aparato costoso, por personal entrenado y, por lo tanto, requiere mayor tiempo para su realización.

 

 

Más información Información :

Protocolos SEGO ( Sociedad Española de Ginecología y Obstetricia )

AEPCC ( Asociación Española de patología Cervical y Colposcopia )