La criopreservación o vitrificación de ovocitos es una técnica mediante la cual una mujer puede preservar su fertilidad. Inicialmente estos programas iban dirigidos a pacientes oncológicos que se sometían a esta técnica para evitar que la radioterapia o quimioterapia pudiera dañar sus ovocitos. Pero con la incorporación de la mujer al mundo laboral, la edad de maternidad se ha retrasado y con ello la decisión de ser madre.
¿En qué consiste?
Con este sistema de enfriamiento ultrarrápido se consigue evitar la aparición de cristales de agua que dañen las células a -196º C, de manera que no hay actividad biológica ni deterioro de las mismas. Estamos hablando de una técnica con una tasa de supervivencia del 95-98%.
Merece la pena acudir a un centro de reproducción asistida y valorar esta opción al alcance de cualquier mujer. Las dosis de medicación a utilizar son bajas e individualizadas según las condiciones de cada paciente y hay que señalar, que los mejores resultados se obtienen en mujeres menores de 35 años.
Se te someterá a una estimulación ovárica con el objetivo de conseguir un número adecuado de ovocitos y de una buena calidad.
Serán tratados y vitrificados en el laboratorio, dónde permanecerán perfectamente vitrificados e identificados hasta el momento preciso en que decidas ser madre.
Si tienes menos de 35 años y no te planteas ser madre en un futuro próximo no lo dudes más: Preserva tu fertilidad.
*imagen cedida por Tahe Fertilidad